Creando un newsletter en tiempo récord

Creando un newsletter en tiempo récord

A la hora de crear newsletters para mantener informados a nuestros clientes externos e internos sobre los temas importantes. Al menos una vez el mes debemos realizar esta labor para mantener un canal de comunicación con nuestro público, pero en muchos casos al no manejar un esquema para su creación termina tomándonos mas de lo debido.

Así que podemos seguir un simple esquema que nos ayudará a  comenzar una nueva era en la que los newsletter sean realizados a la velocidad de la luz y no consuman mucho de nuestro tiempo.

La preparación previa es básica para tener el material suficiente en pos de crear los bocetos primarios, pues uno de los factores que más nos demoran al inicio del proceso creativo es el tiempo que perdemos en encontrar material e información con la cual trabajar.

Para ello debemos tomar nota en las reuniones de la compañía semanas antes de realizar el producto. De esta manera tendremos ideas actualizadas de temas como mejoras, actualizaciones e iniciativas relacionadas con nuestro producto, los cuales nos ahorrarán esfuerzo. Incluso ideas al azar relacionadas con nuestro producto pueden servir, aunque no sean usadas inmediatamente pueden ser usadas para crear nuestra propia lista utilizable en caso de emergencia.

Debemos determinar cuales son los objetivos primarios de nuestros textos informativos. Una vez encontrados los objetivos debemos asegurarnos que se encuentren lo mas claros posibles al frente y centrados dentro de nuestro newsletter.

Existen múltiples enfoques para determinar que es lo más importante a resaltar, aunque si no tenemos ideas podemos publicitar nuevas características, ofertas, obtener datos o buscar hacer una conexión emocional con el público dejando abierta la puerta para futura publicidad.

Una vez logrados estos dos puntos importantes lo que falta es hacerlo agradable a nuestro público. Para ello nos valemos de un diseño que llame la atención, mientras que utilizamos una tipografía y copy que hagan muy fácil la lectura de la información plasmada.

Aquí es cuando la creatividad debe aflorar, pues podemos optar por un formato de texto con imagen donde resaltemos elementos de interés para nuestra audiencia, el cual debe ser corto y conciso con un uso de imágenes muy sobrio.

Por otro lado podemos elegir un formato donde rompemos el texto con imágenes, botones y links dejando respirar a todos los elementos de la composición, lo cual logrará un estilo agradable a la vista que puede atraer e incitar a la interacción.

Teniendo ordenado el proceso de producción podremos disminuir los tiempos de creación de los newsletter y optimizar nuestra labor.